Según los datos presentados por UNDESA1, la región del Caribe alberga a 1.4 millones de inmigrantes, lo que representaría el 3.3% de su población total, estimada en 39 millones de habitantes. Es decir, es una región fundamentalmente de origen y tránsito de migrantes, como lo muestra el reporte de UNDESA2, según el cual el 90% de la población migrante del Caribe reside fuera de su país de origen. Esto podría deberse a que muchos de los estados insulares constituyen pequeños territorios en donde las dinámicas productivas no ofrecen suficientes posibilidades de desarrollo económico a sus habitantes, influyendo de esta manera en su decisión de emigrar. Los principales destinos migratorios, tal como destaca Riveros3, son los Estados Unidos, Canadá y varios países europeos. Si bien no existen datos actualizados al 2014 sobre población y migración por parte de la División de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas o de otras organizaciones internacionales que se ocupan del estudio de los movimientos migratorios, es importante resaltar las principales tendencias migratorias que se mantuvieron durante el 2014. Con esta finalidad, a continuación, se reproduce y actualiza la tabla sobre población y migración que elaborara Rodríguez4 con el objeto de ofrecer una visión comparativa de algunos países de la región. Cabe mencionar que ésta incluye una columna adicional que hace referencia al Producto Interno Bruto (PIB) per cápita, en un intento por conectar las dinámicas económicas nacionales con el fenómeno migratorio.5
Como muestra la Tabla 1.1, las Antillas Mayores, principalmente Puerto Rico (46.3%) y Jamaica (39.3%), sobresalen por su elevada tasa de emigración con referencia a su población, seguidos por Cuba (13.1%), República Dominicana (11.5%) y Haití (11.4%). En conjunto, estos países aportan 7.7 millones de emigrantes que representan el 18% de la población total de la región. La alta proporción de jóvenes en la población combinada con bajas tasas de crecimiento económico y por lo tanto la falta de suficientes empleos, sobre todo en países como Haití y Jamaica, además de la ocurrencia de desastres naturales, están entre las principales causas que ayudan a explicar este fenómeno.
En el caso de las Antillas Menores, dos islas sobresalen por su elevada tasa de emigración: Dominica (106.5%) y Montserrat (286.4%)6. Antigua y Barbuda, Curazao, Granada, San Cristóbal y Nieves y San Vicente y las Granadinas también poseen tasas de emigración elevadas por encima del 50% de su población7. De igual manera, como muestra la Tabla 1.1, más de un cuarto de la población de Trinidad y Tobago (27.9%) y Barbados (35.2%) es emigrante. Tal como ocurre en el caso de las Antillas Mayores, la falta de empleo y el subempleo constituyen uno de los principales factores para migrar, especialmente en el Caribe anglosajón, donde el porcentaje de jóvenes desempleados excede el 30% de la población.8
En cuanto a la inmigración, los estados de Antigua y Barbuda y Bahamas poseen el mayor número de inmigrantes comparado al tamaño de su población, con un 31.9% y 16.3% respectivamente. Esta situación contrasta significativamente con la experimentada en los territorios de ultramar tanto de Reino Unido (Islas Caimán 57.6%, Anguila 45.6% y las islas de Turcos y Caicos 34.3%) como de los Países Bajos (San Martín 59.7%, Bonaire, Saba y San Eustaquio con 65.9%), en donde se registran tasas de inmigración muy elevadas al ser comparadas con el tamaño de sus poblaciones. Igual situación se presenta en las Islas Vírgenes de los Estados Unidos donde los inmigrantes representan el 59.3% de su población.9
Por otra parte, la República Dominicana es el país que mayor número de inmigrantes recibe (en términos absolutos) con 402,506 personas que representan el 3.9% de su población. Sin embargo, cabe mencionar que las cifras de UNDESA difieren de aquellas presentadas por la Encuesta Nacional de Inmigrantes (ENI) de la República Dominicana de 2012, que mostró un total de 524,632 inmigrantes, que representarían un 5.4% de la población total del país.10 En el extremo opuesto se encuentran Haití y Cuba como los países que reciben el menor número de inmigrantes (0.4% y 0.1% respectivamente).11
Por otro lado, Granada, Barbados, las Bahamas y San Cristóbal y Nieves son importantes países de destino de la migración intrarregional. Al respecto, según datos de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM)12, “la proporción de inmigrantes como porcentaje de la población de estos países se sitúa en torno al 10 por ciento y, en la mayoría de ellos, los nacionales del Caribe constituyen más de la mitad de la población inmigrante”. Este hecho estaría ligado principalmente a los mayores niveles de prosperidad económica y calidad de vida (entendida como provisión de servicios públicos) que ofrecen estos países y que se refleja en sus PIB per cápita, que son de los más elevados de la región Caribe (Granada con US$10,339, Barbados con US$13,604, Antigua y Barbuda con US$18,800 y Bahamas con US$21,414).
En cuanto a la proporción de mujeres entre los/as migrantes, el promedio de la región de Latinoamérica y el Caribe (50.1%) supera ligeramente el promedio mundial (49.9%).13 Sin embargo, y como lo señala Rodríguez14, el promedio de la región Caribe (50.9%) sobrepasa inclusive al promedio de la región latinoamericana. Únicamente dos países, la República Dominicana y Haití, tienen el porcentaje más bajo de mujeres migrantes, con 39% y 42% por ciento respectivamente. Los tres principales países y territorios de ultramar en términos de un mayor porcentaje de mujeres migrantes son Barbados (59.6%), Curazao (58.9%) y Martinica (55.8%).
Referencias
1 UNDESA (2013) considera a los siguientes estados soberanos como parte de la región Caribe: Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Cuba, Dominica, Granada, Haití, Jamaica, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas y el estado libre asociado de Puerto Rico. Adicionalmente, UNDESA incluye dentro de esta región a los territorios de ultramar del Reino Unido (Anguila, las Islas Vírgenes Británicas, las islas Caimán, las Islas de Turcos y Caicos y Monserrat; las Islas Vírgenes (de los Estados Unidos); los departamentos franceses de Martinica y Guadalupe; los estados autónomos de los Países Bajos (Aruba, San Martín y Curazao); además, UNDESA ofrece datos para el denominado “Caribe Holandés” (Bonaire, Saba y San Eustaquio). No se incluyen estados como Surinam o Guyana ya que UNDESA los clasifica como parte de América del Sur o Belize que forma parte de Centro América.
2 United Nations Department of Economic and Social Affairs (UNDESA). 2013. International Migration Wallchart 2013. Disponible en:
http://www.un.org/en/development/desa/population/migration/publications/wallchart/index.shtml
3 Riveros, N. (2013). Estado de arte de las migraciones que atañen a la República Dominicana 2012. Santo Domingo, RD: OBMICA. Disponible en:
4 Rodríguez Grullón, A. (2014). Estado del arte de las migraciones que atañen a la República Dominicana 2013. Santo Domingo, RD: OBMICA. Disponible en:
5 La Tabla 1.1. está basada en datos del UNDESA, el mismo que trabaja con estimaciones y recopilando información producida por los gobiernos nacionales (especialmente censos, que por su naturaleza se realizan cada 5-10 años). De igual manera, estos datos oficiales no recogen información sobre la migración irregular, además de presentar variaciones en la taxonomía utilizada por cada agencia estadística gubernamental en la recolección de los datos (Kairi Consultants, Ltd. (2013:18). Human mobility in the Caribbean: Circulation of skills and immigration from the South. Research Paper ACPOBS/2013/PUB16. ACP Observatory on Migration. Disponible en: http://www.acpmigration-obs.org/node/7532). Todos estos factores contribuyen a que los valores presentados pueden estar subestimados, sin embargo, permiten realizar comparaciones y brindar un panorama bastante acertado de la realidad migratoria regional.
6 En el caso de Montserrat, cabe mencionar que esta tasa de migración tan elevada fue motivada principalmente por las continuas erupciones del volcán Soufrière Hills desde su reactivación en 1995, la cual continúa hasta el presente. En 1997, una fuerte erupción destruyó la capital de la isla Plymouth, motivando el desplazamiento de aproximadamente 7,000 personas y dejando 2/3 de la isla deshabitada. Las personas desplazadas fueron relocalizadas en la parte Norte de la isla, en la vecina isla de Antigua y otras en el Reino Unido (Wadge, G., R. Robertson y B. Voight. (2014). The Eruption of Soufriére Hills Volcano, Montserrat from 2000 to 2010. Geological Society Memoir. No. 39. Londres).
7 Rodríguez (2014:22).
8 United Nations Population Fund (UNFPA). 2014. Annual Report 2014. A year of renewal. Disponible en: http://lac.unfpa.org/sites/lac.unfpa.org/files/pub-pdf/UNFPA_annual_report_2014_en_0.pdf
9 United Nations Department of Economic and Social Affairs (UNDESA). 2013. International Migration Wallchart 2013. Disponible en:
http://www.un.org/en/development/desa/population/migration/publications/wallchart/index.shtml
10 Oficina Nacional de Estadísticas República Dominicana (ONE). 2013. Primera Encuesta Nacional de Inmigrantes en la República Dominicana ENI - 2012. Versión resumida del Informe General. Santo Domingo, RD: ONE.UNFPA. Disponible en: http://media.onu.org.do/ONU_DO_ web/596/salaprensapublicaciones/docs/0321395001368132272.pdf
11 United Nations Department of Economic and Social Affairs (UNDESA). (2013). International Migration Wallchart 2013. Disponible en: http://www.un.org/en/development/desa/population/migration/publications/wallchart/index.shtml
12 Organización Internacional para las Migraciones (OIM). (2015). Tendencias migratorias en la Región. Oficina Regional para Centroamérica, Norteamérica y el Caribe. Disponible en: http://costarica.iom.int/es/tendencias_migratorias_en_la_region
13 ACP Observatory on Migration. (2013:34). Migration and development within the South: New evidence from African, Caribbean and Pacific countries. Ginebra, Suiza: International Organization for Migration.
14 Rodríguez (2014:23).
Citación sugerida:
Riveros, N. et al. 2015. Estado del arte de las migraciones que atañen a la República Dominicana 2014. OBMICA. Santo Domingo: Editora Búho.